viernes, 21 de octubre de 2011

Una apuesta acertada


Presumen de no tener clientes, sino amigos, y esa es una de las claves de su éxito. La Victoriana no es una tienda de decoración más, es un espacio único en Galicia donde bucear entre mobiliario nórdico de mediados de siglo y objetos vintage, además de un lugar donde aprender de los conocimientos y la experiencia de sus propietarios: Víctor y Ana.



En un pueblecito de la provincia de Pontevedra, Mondariz Balneario, que no alcanza los 800 habitantes, se encuentra esta antigua tienda de ultramarinos, construida en el siglo XVIII, donde antaño los vecinos aprovechaban para tomarse un vino cuando acudían a hacer la compra. Un lugar lleno de vida, que Víctor y Ana decidieron perpetuar convirtiéndolo en un establecimiento donde los amantes de la decoración pudieran echar horas fisgoneando entre la selección de muebles y productos que suelen traer del norte de Europa. “A la gente que busca este tipo de cosas le gusta estar tranquilo y no les importa desplazarse ex profeso para venir a la tienda”, explica Víctor. 

 
Él procede del mundo del mueble, la restauración y la tapicería. Ella se dedica al estilismo. Y ambos comparten la pasión por los viajes. Se arriesgaron a importar los productos con los que disfrutaban en otros países y “la apuesta fue acertada”, se congratulan.
Empezaron con el estilo francés y el decapado, pero ahora su fuerte son las piezas nórdicas de mediados de siglo. Pero no es lo único que se puede encontrar en La Victoriana. Son capaces de combinar una silla modernista con una mesa tocinera o un mueble rústico gallego. Opinan que el futuro inmediato está en “lo industrial, un poco decadente, con mezcla de hierro y madera”.


En su tienda ofrecen desde ropa, bisutería o jabones, hasta teléfonos, lámparas o costureros de otras épocas. En un almacén ubicado a pocos metros de la tienda, apilan muebles restaurados o en proceso.


Como “calculadoras andantes” visitan proveedores de Holanda, Bélgica, Inglaterra u otros países para traer en camiones productos a precios competitivos. Una vez en casa, los restauran sin sobrepasar el punto en el que pierden esa esencia de lo añejo.



A sus “amigos” no solo les venden, sino que les asesoran, les buscan el producto deseado e incluso visitan sus casas para poder ofrecer una opinión más fundamentada.

Muy recomendable.







1 comentario:

  1. Me encanta esa tienda!!!. Y además conozco a su dueño.
    Merece la pena visitarla así que os animo a que os acerquéis a conocerla.

    Besos, la tía de un amigo tuyo que me ha pasado el enlace de tu blog. Por cierto muy chulo, y el que añado a mis favoritos.
    Y si quieres entra en el mío http://missperchitas.blogspot.com

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